Un sindicalista opositor como Mariano Mena, con procesos pendientes por mal manejo de fondos, le ha fallado a los agentes del poder económico en la ejecución de sus planes de desestabilización llevados a cabo durante la última de las operaciones sediciosas en contra del poder constitucional.
Mena y el “Frente Guacho” demostró, no solo falta de capacidad de convocatoria sino de valentía para realizar sus planes que terminaron en tumultos callejeros y no fueron suficientes para elevar al poder a Juan Carlos Varela.
La nueva estrategia es ahora obligar por todos los medios a los partidos políticos, a aceptar un candidato de supuesta unidad, que sería apoyado por los ricachones y los medios de comunicación a su servicio con el propósito de evitar la permanencia en el poder de Cambio Democrático (CD).
Desmantelado este escenario contaban con Mitchel Doens en el PRD, Gerardo Solís en el Tribunal Electoral, además de los varelistas y sus grupos de la llamada sociedad civil para continuar con su guerra política contra el presidente Ricardo Martinelli.
Al parecer Milton Henríquez reemplaza a Juan Carlos Varela y a Mariano Mena, quienes no sirvieron para sus propósitos golpistas y por eso aparece ahora en todos los medios televisivos puestos al servicio de los poderosos.
La nueva estrategia para estos fines es acabar con la vida interna de los partidos y crear una agrupación similar a la Coalición Patriótica Nacional que en su momento impulsó el general José Antonio Remón Cantera o al PRD, que fue una iniciativa del general Omar Torrijos; sin embargo, este movimiento no cuenta con una figura central de suficiente peso.
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