En 2014 la población con discapacidad del país podría recibir descuentos y exoneraciones en la compra de medicamentos, transporte, actividades de recreación, servicios médicos, públicos y de comida.
Los beneficios semejantes al que gozan los jubilados y pensionados los propuso ayer el presidente de la República, Ricardo Martinelli, en el acto de entrega del primer desembolso del programa “Ángel Guardián”, dirigido a personas con discapacidad severa y pobreza extrema.
Para lograrlo, el mandatario dijo ante el grupo de beneficiarios que solicitará a los diputados “que se presente un proyecto de ley en el que se les otorguen los mismos beneficios que tienen los jubilados a las personas con discapacidad”.
Una intención parecida fue descartada en marzo pasado, cuando Martinelli vetó por “inconveniente” el proyecto de ley 199, que proponía una equiparación de oportunidades para las personas con capacidades especiales y multas de hasta 500 dólares para los conductores que utilicen estacionamientos exclusivos para estas personas.
En la justificación presidencial se precisó que la discapacidad no ha había sido reglamentada, por lo que no existía claridad en cuanto a la calidad o condición de los discapacitados que serían beneficiados.
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