Desde la llegada al poder el partido Cambio Democrático estableció como uno de sus principales proyectos la realización de un proyecto desarrollista social que desmantelara el andamiaje construido tras la invasión militar estadounidense en 1989.
Este proyecto político se ha consolidado en el pueblo panameño, por lo que la oposición no tiene más remedio que aceptar e imitar lo que lleva a cabo el gobierno y que, en su momento, no tuvieron ni la creatividad ni la voluntad para llevarlo a cabo.
El opositor Partido Revolucionario Democrático (PRD) se la ha pasado tratando de ignorar las obras físicas y sociales del gobierno y ahora parecer convertirse en relacionista público, al aceptar todo lo hecho y comprometerse a continuar con los proyectos del gobierno del presidente Ricardo Martinelli.
Pero no se trata de imitar sino de tener la capacidad de trabajo y eficiencia que han demostrado el presidente de la república y su equipo de colaboradores, algo que no pudieron hacer durante cuarenta años los del PRD, sobre todo su candidato presidencial que, cuando ocupó la alcaldía capitalina, con un presupuesto de casi mil millones de dólares,
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