La Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura no niega su preocupación por los subsidios directos que benefician al pueblo y exponen como pretexto que debe ejercerse el “control del gasto público”, sin darse cuenta que ese recurso entregado a los más necesitados es lo que mantiene la paz en el país. Esta organización empresarial y comercial no niega su nostalgia por los tiempos de las administraciones PRDs que no hicieron el menor esfuerzo por cobrarles los impuestos a quienes más tienen.
Queda claro que los sectores más importantes del poder económico, con sus medios de comunicación, buscan afanosamente la vuelta al poder del partido de la dictadura para volverlo a tener al servicio de sus intereses.
Nuestra opinión
Tanto los economistas de oposición como los sectores económicamente poderosos que surgieron durante la época de la dictadura militar, defienden una democracia capitalista ajustada a sus cálculos financieros, ignorando completamente las necesidades de los ciudadanos. Programas como 100 a los 70, las becas universales, los subsidios a la energía eléctrica, el moderno sistema de transporte público y tantos otros que redundan en beneficios sociales, están en peligro si regresan los representantes del bipartidismo que rechaza la democracia con sentido social, impulsada por el partido del cambio.
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