Tanto en su vida pública como en la privada, Alberto Vallarino, miembro del partido Panameñista, ha demostrado ser un hombre muy centrado.
Así lo han demostrado los hechos, sobre todo los políticos, con los que ha demostrado firmeza, lealtad y respeto por la doctrina que su partido propugna, a pesar de haber sido víctima de las acciones de Juan Carlos Varela, solapado enemigo de Mireya Moscoso, presidenta vitalicia de su partido, de quien el ahora candidato presidencial, se ha aprovechado.
Cuando la creyó acabada, Varela le mostró sus fauces y terminó asestándole una estocada traicionera, al punto de quitarle la habitación que había puesto a su disposición en la hacienda que el presidente del panameñismo tiene en Pesé.
Tras la derrota de Alberto Vallarino ante Mireya Moscoso, el demócrata cristiano Varela, se lo llevó como candidato a una organización política moribunda, lo que resultó en un sonoro fracaso.
A pesar de esa derrota, Vallarino se repuso y normalizó sus relaciones personales y políticas con Varela.
Ahora Vallarino ya conoce perfectamente a Varela y por eso no cayó en la trampa de dar declaraciones políticas en los actos de celebración del aniversario del Canal de Panamá, para no dañarla la majestad del momento.
Sin embargo, Varela sí hizo declaraciones políticas sin importarle que el Canal no tenga nada que ver con estos asuntos.
Por este tipo de deslices es que el dirigente histórico del panameñismo, Marco Ameglio, considera que Varela no ganará las elecciones de mayo del 2014.
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