Autoridades confían en que el plan disminuirá la criminalidad
La Policía Nacional apostó desde ayer por un nuevo modelo de erradicación de la violencia en los barrios a través de la Unidad Preventiva Comunitaria (UPC).
Se trata de un grupo de 160 agentes policiales capacitados por la Policía de Brasil en el acercamiento permanente con la comunidad y mediador en los conflictos sociales.
El programa, que se inició en el proyecto de Renovación Urbana de Curundú, se aplicará en barrios vulnerables, como El Chorrillo, Santa Ana, y también en Colón.
“En ustedes estamos poniendo toda la esperanza para que la violencia disminuya”, destacó Julio Moltó, director de la Policía Nacional, frente a un grupo de residentes que desde ayer estarán custodiados las 24 horas por los miembros de la UPC.
En tanto, José Raúl Mulino, ministro de Seguridad, consideró oportuno iniciar con este nuevo modelo de orden público en el Día Internacional de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (ayer).
Ambos funcionarios expresaron su optimismo de que con la entrada de la UPC se sustituya la represión por la prevención. Para demostrarlo, en el acto de presentación de la UPC se despidió a la Unidad de Control de Multitudes que por 19 años custodió el sector.
El corregimiento de Curundú, con 19 mil habitantes, según el censo de 2010, tiene una tasa de criminalidad de 35.7% por cada 100 mil habitantes, según el reporte del Sistema de Estadísticas Criminales.
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