LA OPINION PANAMA - El mensaje del candidato presidencial oficialista, José Domingo Arias, no ha variado y se ha reafirmado en que su intención es tener una muy cercana relación con el pueblo, para enfrentar las constantes conspiraciones de los opositores que solo buscan desvirtuar su plan de gobierno denominado Plan País Más. Las preocupaciones del poder económico se han incrementado ante los resultados de las encuestas que siguen favoreciendo la propuesta del candidato del cambio, al punto de que intentan favorecer a sus figuras presidenciales para confundir al electorado.
IPSOS
La encuestadora IPSOS, contratada por MEDCOM y La Estrella de Panamá dieron el primer paso para crear desasosiego en las filas oficialistas pero los recientes resultados divulgados por La Prensa han dado al traste con los planes de los plutócratas que, a toda costa, buscan el poder, aún a costa de cometer fraude. Los resultados obtenidos por la firma Quantax Panamá, S.A., para el diario La Prensa ubican a Arias con un 37.7 por ciento, a Navarro con un 29.7 y a Varela con un 21.4.
Dichter and Neira
Ante la divulgación de estas cifras, la guerra psicológica adquiere ribetes más escandalosos, ya que TVN tenía preparados los resultados de la encuesta Dichter y Neira pero sus directivos decidieron darlos a conocer en otra fecha. Dijeron que para lograr cifras más exactas cambiarían de metodología, a pesar que Dichter y Neira es una de las que cuenta con los mayores porcentajes de acierto en sus predicciones. La citada firma ha estado recibiendo presiones de parte de los agentes del poder económico y hasta han llegado a ser supervisados sus resultados por una auditoría de Miami.
El poder económico en dilema
Con JD Arias encabezando las preferencias de los electores, el poder económico se ha visto envuelto en otro dilema, ya que su as de oro, Alberto Alemán Zubieta, ha caído en el descrédito por la crisis de los trabajos de ampliación del Canal, de la que podría ser uno de sus principales responsables.
Además del cierre de postulaciones a estas alturas del calendario electoral, ahora los dueños de dinero enfrentan el problema de presionar para bajar a uno de los candidatos presidenciales de la oposición para enfrentar a uno solo a la candidatura oficialista.
Esa es la razón que juegan las encuestas en estos momentos que patrocinan los bloques económicos. De allí que la dictadura mediática se encuentre dividida entre los que apoyan a Juan Carlos Navarro (el grupo de los González Revilla de Medcom) y los que apuestan por Juan Carlos Varela (Stanley Motta, Federico Humbert y Ricardo Alberto Arias).
El lema de campaña de Varela, “el pueblo primero”, permite ver la forma en que sus dos caras son utilizadas, ya que busca los votos de las masas pero se relaciona y recibe instrucciones de los señores de los anillos; es decir, está con Dios y con el diablo.
Frente Guacho
Hace poco se ha reactivado el Frente Guacho, cuyos miembros no niegan que son conspiradores, así como tampoco sus intenciones de alzarse en armas si pierden las elecciones. Tal vez tengan menos fuerza ahora porque han perdido algunas de sus figuras, como la ecologista Raisa Banfield, aspirante a un cargo de elección popular.
La oposición no descarta ninguna acción para tratar de modificar los resultados de las encuestas y al fracasar en todos sus intentos alimentan la esperanza de iniciar movimientos desestabilizadores, tal como los que llevaron a cabo en Changuinola, San Félix y Colón.
El frente es encabezado por el violento Mariano Mena, el ya descalificado estratega Mitchel Doens y el anarquista Edgardo Voitier. Hay que agregar que la cacica Silvia Carrera, también integrante del movimiento, responde a los intereses de Bobby Eisenmann. Se sabe que buscan crear el caos antes de las elecciones y el gobierno debe estar bien pendiente de sus jugadas. La fuerza económica pudiera estar planificando su última carta ante el eminente triunfo de José Domingo Arias.
El Parlatino levanta sospecha
El Tribunal Electoral cambió la junta de escrutinio de la sede de Atlapa para el Parlatino, organismo cueva de los PRD, que se lo entrego el diputado Popi Varela durante su presidencia al diputado opositor, Elías Castillo, quien lo convirtió en un frente de cuadros de dicho colectivo.
Esto ha hecho que se tenga desconfianza, ya que el recinto no da garantías sobre todo porque el magistrado presidente Pinilla no ha observado neutralidad en este proceso. Por eso es que en el Partido Cambio Democrático se comienza a cuestionar ese lugar, un notorio bastión perredista.
Replanteamiento de tácticas
Al darle seguimiento a la oposición en las bases del CD se comienzan a plantear fórmulas ante la eventualidad de que se pretende cometer un fraude electoral. Por su parte, la juventud del CD considera que se debe realizar una evaluación para tener claro lo que pudiese ocurrir y no ser sorprendidos por un Tribunal Electoral que no esconde sus inclinaciones hacia los adversarios del gobierno, tal como ya hizo en el caso de El Bebedero de Tonosí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario