El gobierno del presidente Ricardo Martinelli cumplió con los adultos mayores al aprobar y convertir en ley de la República, el incremento del subsidio mensual hasta 120 dólares, mejorando así la calidad de vida de muchos panameños y panameñas que se encontraban en una situación socioeconómica vulnerable.
Los beneficiados con este programa suman más de 120 mil hombres y mujeres que, por diversas causas, no pudieron cotizar en la Caja de Seguro Social, ya que se dedicaban a actividades laborales informales.
Muchos de los favorecidos fueron jornaleros, trabajadoras domésticas o estuvieron realizando labores en sus casas sin recibir remuneración alguna y tampoco cotizar para alcanzar una jubilación decorosa por lo que este gobierno ha hecho justicia distribuyendo hasta la fecha unos 400 millones de dólares de este subsidio.
El programa 120 a los 70 es uno de los que demuestra mayor sensibilidad y solidaridad humanas, de parte de un gobierno que ha repartido equitativamente las riquezas pensando, sobre todo, en aquellos que menos tienen.
Estamos seguros que el papa Francisco, cuando reciba al presidente Martinelli, elogiará esta iniciativa del gobierno panameño, que le ha dado un rostro humano al Estado practicando los valores cristianos, fundamento de la doctrina desarrollista social.
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