La ministra de Educación, Lucy Molinar, condicionó su permanencia en el cargo a que la política salga de la esfera donde se desempeña como jefa de la cartera.
La posición la hizo pública, después de que circularan rumores de que abandonaría el cargo por presiones políticas. A pesar de que hasta entonces se trataba de ”rumores”, la titular de Educación no descartó la medida sin antes conversar con el presidente de la República, Ricardo Martinelli, para exponerle la inquietud de que la “educación no tiene bandera política”.
Molinar reconoció que no ha “logrado vender el criterio de que la educación y la política no se mezclan”.
A manera de tregua la titular de Educación pidió un apoyo del país, “porque en las aulas caben los niños del Partido Revolucionario Democrático, Cambio Democrático, Panameñismo, caben todos”.
Aunque negó categóricamente de que haya recibido presión del mandatario, se comprometió a entablar conversaciones con los distintos sectores del país, “por el bien de la juventud. Es necesario hacer un alto”.
Al final de la tarde, el secretario de Comunicación del Estado, Luis Eduardo Camacho, negó que durante la reunión se haya abordado el tema de la posible renuncia y la exigencia anunciada por Molinar en horas de la mañana.
Sin embargo, las reacciones surgieron de inmediato. La Confederación de Padres de Familia que dirige Aixa Gómez, pidió a Molinar que reconsidere la posibilidad porque sería un retroceso para la educación panameña, que muestra avances significativos.
Un grupo de docentes que participa en el Foro Virtual Educa Panamá 2012 realizó una cadena humana para respaldar la gestión de la ministra de Educación y rechazar la injerencia de la política en la educación denunciada por Molinar.
Yadira Pino, de la Asociación de Educadores Veragüenses, piensa que se trata de una actitud que ”asume la ministra para victimizarse de un ambiente que ella misma propicio por su prepotencia y falta de diálogo con los gremios”.
Entre tanto, el administrador de la Autoridad de Turismo, Salo Shamah, consideró que “los ministros deben seguir trabajando hasta cuando se acabe el gobierno o hasta que el presidente le pida a uno que deje la labor”.
Ministros niegan presiones
- El ministro de Gobierno, Jorge Ricardo Fábrega, calificó de especulación los señalamientos de que existan presiones políticas para que la titular de Educación abandone el cargo. Mientras, Ricardo Quijano, ministro de Comercio, dijo que es el presidente quien toma la decisión si cree que tiene que hacer cambios en el Gabinete
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