Cuando el
pueblo panameño decidió que Ricardo Martinelli fuera el Presidente de la
República, también le dio el voto de confianza a una alianza electoral que se
comprometió en cumplir con una agenda social a beneficio de los que menos
tienen.
Por esa razón, una vez llego el uno de julio
del 2009 se puso en marcha todo un
trabajo en equipo conformado por los mejores hombres y mujeres de los partidos políticos que conformaban
esta alianza política.
En un principio había muestras de ese trabajo
solidario, pero esa insaciable sed de poder de parte de un político, como Juan
Carlos Varela, quien en realidad demostró que sus verdaderos motivos eran los
interés personales por encima de los interés del pueblo, hizo que el Partido
Panameñista, tuviera que salir del gobierno para sumarse a la oposición
política del país.
Ahora vemos con mucha pena ajena, como Juan
Carlos Varela, que dice llamarse oposición usa las obras de este gobierno para
hacer campaña política, porque su verdadero ideal no es con el pueblo, ni mucho
menos mejorarles la calidad de vida a quienes menos tienen, su verdadera ideal
es llegar al poder, ansioso por la avaricia y por compensar con migajas al séquito de seguidores que hoy lo defienden a capa y espada.
Que lamentable que ahora Varela hoy se cubra en el manto de obras que
han dado tantas oportunidades a la gente que antes no la tenían como es el caso
de 100 a los 70 que próximamente se convertirá en 120 a los 70, porque hay un
compromiso de este gobierno con la gente humilde para que sigan creciendo como
está creciendo económicamente este país.
Que lamentable que ahora Varela quiere hacer
política con obras colosales del gobierno, aparándose en su manto de
vicepresidente de la republica; recuerde que usted es oposición, pero parece
que cuando le conviene se dice llamar parte de este gobierno y tan grande es el
descaro que usa estos recursos del Estado para tratar de sacar provecho en
busca de sus interés personales.
Pero este pueblo no es tonto y sabe reconocer a
esos lobos con piel de ovejas, jinetes de la apocalipsis que buscan sembrar
miedo y sosobra ente el pueblo para aparecer como salvadores, cuando en
realidad son enemigos ocultos de los que menos tienen, por la simple razón de
querer seguir acumulando mas fortunas y
el querer alcanzar un anhelado poder para alimentar su ego.
Vuelvo y reitero este pueblo no es tonto y ahí
están las encuestas que hablan claro y que colocan a un Juan Carlos Varela en
un modesto tercer lugar, ahí están las encuestas, hasta las publicadas por sus
medios aliados que demuestran un absoluto rechazo contra una figura que ha
demostrado que nada le interesa con el pueblo.
Por eso me atrevo a darle un consejo señor Juan
Carlos Varela, el delito electoral se condena y lo peor es la condena moral,
por eso cuando alguien venga a sacarle en los medios tal alto grado de descaro
no venga a llorar y calificar como campaña sucia lo que es la verdad y
solamente la verdad.
La peor muestra de descaro es ahora está, a
venir a utilizar el Proyecto Curundú, para hacer política, ahora si las cosas
que hace el gobierno son buenas, porque le sirven para sus intereses mezquinos,
eso no es justo para quienes han visto realizado un proyecto de vida, no solo
con una oportunidad de una vivienda digna, sino que también se le da una oportunidad
de una mejor vida, con facilidades para obtener un empleo o hacer sus propios
negocios.
El proyecto Curundú es una obra imperdonable de
este Gobierno, en donde primero se ha pensado en su gente, y la prueba se mide
con los números donde los caos delictivos y de violencia son hechos aislados y
no como antes que eran el pan de cada día.
Ya Curundú no es considerado uno de los
corregimiento más violentos del país, ahora se le ha cambiado la cara de esta
comunidad, la gente ha dado esa muestras de agradecimiento, por eso no venga
ahora señor Varela a provechar esta coyuntura social para querer ganar
electores en su proyecto personal de llegar al poder para beneficiarse usted y
el grupejo que ha secuestrado el Partido Panameñista.
El pueblo no es tonto y sabe quienes son sus
verdaderos gobernantes y quienes en realidad quieren llegar a provecharse de
las arcas del Estado, sin embargo aquí estaremos desenmascarando a estos
enemigos de la democracia y la justicia social.
@Juan_PTY
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